Siempre sentimos algo especial al elaborar tartas personalizadas en Illescas. Estas tartas se diferencian de las demás en algo fundamental: son únicas. Son tartas elaboradas para alguien en concreto que quiere celebrar algo muy específico. Así que son tartas con significado personal.

Podemos hacerlas de todo tipo. Desde las más clásicas a las más vanguardistas, todas las opciones son posibles. Pero, desde hace unos años, hay una tendencia imparable, de la que queremos hablarte hoy: las fotografías comestibles. Ya sabes: son esas tartas en cuya decoración hay una ilustración o fotografía.

Aunque tienen muchísima salida, todavía nos encontramos con clientes que dudan sobre la salubridad de las fotografías comestibles. «¿Pero la tinta no es veneno?», se preguntan algunos. Te aclaramos la duda para cuando nos solicites tartas personalizadas en Illescas: las fotografías comestibles no tienen nada de tóxico.

En la cocina hemos utilizado colorantes alimentarios desde siempre. Incluso, la sagrada paella lleva colorante amarillo. La diferencia es que ahora la tecnología nos permite introducir esos colorantes en las impresoras. Y también nos permite conseguir «papeles» imprimibles elaborados con ingredientes comestibles. Por ejemplo, el papel de arroz, el papel de azúcar o las obleas.

Como ves, las fotografías comestibles son el resultado de unir lo más clásico con lo más novedoso. Una idea que parecía imposible hace unas décadas, ahora se puede ver sin ninguna dificultad en las pastelerías. La fotografía comestible nos permite el máximo de personalización en una tarta, ya que podemos decorarla con el personaje favorito del niño, la foto de familia de la abuela o el equipo de fútbol del aficionado. Cualquier imagen se puede imprimir... ¡y comer!

En Pastelería Díaz - Miguel nos encanta utilizar la impresión comestible, ya que sabemos que la elección del cliente no puede ser más personal ni hacerse con más cariño. ¡Una tarta realmente especial!